Desde el octágono Por Emiliano Cándido - Cuando uno logra estar tan cerca de su objetivo dos veces y no lo consigue la cima se puede hacer muy alta y las metas caer por el piso. Lamentablemente para Kenny Florian se topó, en ambas oportunidades, con los mejores del momento. Primero fue Sean Sherk, luego BJ Penn. Hoy, conociendo la forma de llegar intenta escalar nuevamente hacia el tope de los rankings, pero esta vez, para no bajarse.
Desde el octágono Por Emiliano Cándido
Cuando uno logra estar tan cerca de su objetivo dos veces y no lo consigue la cima se puede hacer muy alta y las metas caer por el piso. Lamentablemente para Kenny Florian se topó, en ambas oportunidades, con los mejores del momento. Primero fue Sean Sherk, luego BJ Penn. Hoy, conociendo la forma de llegar intenta escalar nuevamente hacia el tope de los rankings, pero esta vez, para no bajarse.
Tras ser sometido por BJ Penn en el cuarto round de su pelea titular en agosto del año pasado, Kenny tuvo que decidir rápidamente hacia donde iba a apuntar su carrera desde ese momento. Sin dudarlo decidió tomar otra vez el camino de los livianos.
Con todo ya estudiado, se lanzó por su tercera oportunidad titular en diciembre ante Clay Guida. Con una fantástica actuación en la que sus puños parecieron más veloces y fuertes que las últimas veces se deshizo de su rival que se vio superado constantemente. Un directo perfecto derribó a Clay y un rápido movimiento le dio a este peleador de origen peruano la victoria a través de un estrangulamiento trasero.
Hoy, en su primera pelea de este 2010, estelarizará el Fight Night número 21 de UFC ante el debutante en la empresa de Dana White, el japonés Takanori Gomi, ex campeón en Pride y uno de los peleadores más temidos de las 155 lbs.
Con respecto a su entrenamiento para este combate que puede ser definitorio para sus aspiraciones titulares reconoce que lo está haciendo a conciencia y pensando en que se puede encontrar con el mejor Gomi.
“Estoy entrenando tan duro como siempre para esta pelea. Creo que Gomi va a ser uno de los rivales más peligrosos con los que he tenido la oportunidad de entrar al octágono. Me estoy preparando para una guerra y buscaré testear mis habilidades frente a él”, comenta.
A pesar de que sabe que el mejor nivel del japonés fue demostrado hace un tiempo en los rings de Pride, reconoce que el talento lo tiene y por eso siempre tuvo la idea de algún día poder enfrentarlo.
“Ha sido uno de los mejores peleadores del mundo por varios años. Y yo aún creo que puede volver a esa forma, los considero muy peligroso y uno de los más completos. Es una pelea con la que he soñado mucho tiempo”, relata.
Obviamente, no comenta las armas que tiene para vencer a su rival, pero sí deja en claro que va a dar todo por salir con su brazo en alto.
“Creo que mis habilidades han ido mejorando desde que empecé a pelear. Si espero ser un mejor peleador en todos los aspectos necesitaré entrar al octágono, mostrar lo que sé hacer y divertirme”, dice ilusionándose con una buena presentación.
Pero también se muestra precavido ante lo que su rival puede hacer: “Que no queden dudas, voy a cuidarme de lo que pueda hacer Gomi. Mi defensa deberá estar en la mejor forma posible y tendré que estar listo para atraparlo en el momento justo porque no tendré muchas oportunidades”.
Volviendo a diciembre de 2009, recuerda la estrategia que planteó para enfrentar a Clay Guida. Sin dudas una de las obras maestras (junto a la pelea con Joe Stevenson), de la carrera de Kenny Florian.
“Mi estrategia se concentró en demostrar las nuevas habilidades que había estado entrenando. La idea era sacar a Guida de lo que acostumbra, no quería pelear su pelea, yo quería hacer la mía. Quería mantenerlo fuera de balance todo el tiempo. Mi objetivo era flotar, hacerlo sentir poco confortable en el octágono y lograr que cometa un error o una serie de errores para terminar con la pelea”, cuenta.
Eso que relata cualquiera puede reafirmarlo observando el combate nuevamente. El planteo fue perfecto y la manera que lo llevó adelante aún mejor.
Tras su derrota con BJ Penn muchas cosas han cambiado y la forma de entrenar es una de ellas.
“El camino por el cual llego a las peleas y la forma en la que entreno es completamente diferente. Mi grupo de entrenadores es el mejor del mundo y ellos se aseguran de que todo esté perfecto para que yo me transforme en un mejor peleador. Ellos trabajan muy duro y me lo demuestran siempre”, explica agradecido.
Y sigue halagando a su equipo de trabajo: “La ruta de aprendizaje y entrenamiento es muy científica. Me gustaría hacer lo que estaba haciendo, pero pudimos aprender de nuestros errores y fue algo muy valioso. Tengo grandes compañeros y asistentes que ayudan a que mejore día a día. No sería nada sin ellos”.
Con este sistema de entrenamientos, este peleador de origen peruano, reconoce haberse transformado en un verdadero analista del deporte.
“Esto se ha vuelto muy emocionante desde la derrota con BJ. Siento que estoy aprendiendo muchas cosas nuevas todo el tiempo y que es un reto mucho más interesante. Con los entrenadores que tengo ahora y el rumbo que estamos tomando, estoy haciendo un curso para ser doctor en artes marciales mixtas. Realmente creo eso, es asombroso”, indica.
Y ya que está haciendo este “doctorado acelerado en MMA” qué mejor que preguntarle a él sobre la siguiente pelea por el título de los livianos entre BJ Penn y Frankie Edgar el próximo 10 de abril en el primer evento de UFC en Abu Dhabi.
“Es un combate muy interesante entre dos pesos livianos muy duros y talentosos. Todo puede suceder y nadie es invencible. Pero estoy seguro de que BJ Penn es el favorito debido al compromiso que tomó con el deporte, a pesar de eso, admiro la ética de trabajo de Frankie Edgar así como también lo hambriento que está. Yo también estuve en su posición, por eso me gustaría que Frankie haga una gran pelea”, reconoce.
Para terminar les deja un comentario muy interesante a todos aquellos que tomaron la decisión de comenzar a entrenar este deporte. Un concepto que puede ser de mucha ayuda para los recién iniciados.
“Yo siempre trato de mejorar día a día como hacen todos. Mi pasión y me ética de trabajo es lo que me ha puesto donde estoy hoy. Todavía tengo mucho por hacer y aprender. Amo lo que hago y ustedes tiene que tener esa misma pasión para hacerlo, tiene que trabajar muy duro para conseguir lo que quieren. No peleen por el dinero o por la fama. El amor por el deporte y el respeto por las artes marciales los conducirán al sendero de la victoria”, concluye.
Por amor al deporte Kenny Florian se ha colocado entre los mejores livianos del mundo. A fuerza de grandes victorias se hizo un nombre en la división y, poco a poco, fue recibiendo el respeto que merece.
Ahora, con 33 años y mucha más experiencia, buscará hacer su tercer intento por el cinturón de campeón. Cree que puede hacerlo mucho mejor si obtiene una revancha con BJ Penn. ¿Será tiempo de que el “doctor en artes marciales mixtas” tenga una nueva oportunidad y el campeonato quede en sus manos? Es cuestión de esperar, pero Kenny se convirtió en un analista de MMA y eso puede complicar a más de uno.