En su último combate ante Clay Guida, Brian Ortega peleó con simplicidad, como resultado dejó a su rival noqueado. Aun así, la victoria marcó en T-City un ambivalente pique emocional entre alegría y pena.
Podría decirse que por años Brian Ortega se había estado preparando para el combate contra Clay Guida. Según él, desde chico era uno de los peleadores quien más le gustaba ver en acción. Ignorando la idea que en algún momento se enfrentarían en el octágono, Ortega logró entender bien el estilo de combate de “The Carpenter”, sus fortalezas y debilidades.
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La admiración por Guida creció, al igual que el artista marcial quien ya no era un niño. Brian estaba listo para entrar al octógono dispuesto a enfrentar a aquellos quienes lo habían inspirado a forjarse como peleador.
La oportunidad llegó y una vez dentro del octágono, le tomó algunos minutos para entender que estaba enfrentando al mismísimo Guida, aquel peleador quien lo hizo estallar en gritos viendo su combate contra Diego Sanchez. Después pensó: “Es real, estoy peleando contra Clay Guida”.
Brian estaba preparado para responder los ataques de Clay en el piso con jiu jitsu, sin embargo, Guida tenía en mente hacer una guerra en pie. Brian no tuvo objeción en seguir lo que su rival proponía, ni siquiera luego de que este lo derribara en el primer round de un golpe. Ahí fue donde “T-City” pensó: “Puedo soportarlo”.
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Veinte segundos separaban a los peleadores de la campana final en el último round de un combate que hasta entonces había estado lleno de intercambios, cuando Ortega arriesgó a dar el tajo final. Los ojos de Guida no mentían, la rodilla conectada por T-City lo había dejado fuera de combate. El referee paró correctamente la pelea.
“Ese no era mi plan, yo quería estrangularlo, pero lo tuve que noquear”, dijo Ortega luego de la pelea y agregó: “Incluso me disculpé con él por noquearlo, pero esto es lo que hacemos”. Brian mostró altos principios como artista marcial y evidenció que quienes pelean no se odian, solo son dos deportistas compitiendo.
El futuro de Ortega puede hacerlo enfrentar algún otro de sus ídolos en busca de pelear por el campeonato. Sin duda, T-City demostró que no importa cuánto duelan los golpes de sus rivales, el trabajo tiene que hacerse.
What better way to share my first wrestling experience than with this man. @clayguida pic.twitter.com/47t2H6euoj
— Brian Ortega (@BrianTcity) 13 de junio de 2016