El veterano Nate Marquardt, se encuentra en un momento de su carrera donde la obligación de ganar es todo, mucho más frente a alguien como Kevin Gastelum, rival que si vence, le traería un rayo de esperanza a su andar en UFC.
Nate Marquardt (36-14-2) estuvo en la cima de UFC, peleando por la corona mediana ante Anderson Silva –sin éxito- y no hace mucho era campeón welter de Strikeforce (2012), pero ahora lucha por su supervivencia en la organización.
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Nate Marquardt ha perdido tres de sus últimas cuatro peleas, dos de ellas por nocaut en el mismo primer asalto, y lo que vemos ahora es una sombra de aquel chico que tenía una pegada demoledora, un gran fuerza física y que pudo moverse, con éxito, entre las divisiones welter y media.
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Marquardt tiene una la experiencia de tantos combates en el octágono y eso le puede servir ante su próximo rival, un mexicano que busca su lugar en UFC. Un triunfo sobre Kelvin Gastelum en UFC 188, el 13 de junio, le puede ayudar a darle un viraje a su carrera, venciendo a un oponente que ha hecho muchos méritos desde que ganó el TUF en 2013 y solo ha sufrido un revés, ante Tyron Woodley, en enero
de este año.
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También, hay una ventaja para Marquardt, la diferencia en tamaño de varias pulgadas, el alcance que podría mantener a raya a Gastelum. Si comparas a los dos, sin duda alguna, Nate tiene ventaja física y es algo que debe tomarse en cuenta para analizar lo viene en esta pelea. Sin embargo, un factor que puede ser determinante es el hecho que Marquardt no tiene nada que perder.
Cuando no hay nada que perder, generalmente estás más relajado y actúas mejor. Eso es posible, aunque ante Kelvin Gastelum hay que estar concentrado 100 por ciento. Veremos si Marquardt puede llevar su carrera de vuelta a la senda del éxito comenzado este 13 de junio y teniendo de base su gran experiencia en UFC.
Difícil será pero no imposible; en las MMA todo se pude dar.