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Tecia Torres, una chica como todas

Esta es una crónica de la visita de Tecia Torres a la Ciudad de México para una serie de actividades promocionales, que la dejaron enamorada de México y sus fans.

Antes de convertirse en peleadora profesional, Tecia Torres quería ser policía, pero el destino le tenía preparada una gran sorpresa. Conoce el camino de “Tiny Tornado” hasta llegar al UFC.
Pasamos dos días juntas. La visita de Tecia Torres a la Ciudad de México me permitió conocer a una chica de 25 años quien en su mente no tiene otro objetivo que el éxito. No solamente sueña con triunfar en su carrera profesional, pues su familia, novio y amigos son una parte esencial en su vida. “Quiero que me conozcan por mi estilo en la jaula, esta era la oportunidad que esperaba”, comenta mientras clava los ojos en la ventana y ausenta su mente por un momento.
Su 1.54 m de estatura no difiere mucho a mi 1.52. Eso sí, su cuerpo esculpido a base de horas de entrenamiento es muy distinto al mío. Una playera de manga corta deja ver sus formados y poderosos músculos. Tecia revisa su celular de forma constante. Si acaso cruzamos un par de palabras sobre el retraso de su vuelo a la capital mexicana y los tacos de carne asada con queso que había comido esa tarde.
Al bajar de la camioneta, me pidió –con un poco de vergüenza- que le tomara una fotografía con su celular y agregó –mientras estiraba la mano para darme su bolsillo blanco-: “Me gustan mucho las redes sociales. Creo que a veces exagero un poco”. Rompimos el hielo y -tras varias tomas– escogió la que subiría a su cuenta de Instagram.
Su español fluye y-aunque en ocasiones pide ayuda con palabras que desconoce- lo hace de gran manera. Mientras esperamos la hora de la convivencia con algunos aficionados, aprovecho para conversar con ella y le pregunto cómo es que aprendió el idioma: “Nací en Boston, pero mis papás se separaron por lo que mi mamá, uno de mis hermanos y yo nos mudamos a Florida desde hace 20 años. En la escuela llevábamos clases de español y eso me ayudó mucho”- responde.
A sus 25 años de edad continúa invicta con cinco triunfos –todos por decisión- y ante rivales como Paige VanZant, Rose Namajunas y Felice Harrig.
Soñadora, pero realista, “Tiny Tornado” tiene un lema: “Con trabajo duro, uno puede lograr todo lo que se proponga”. Y narra cómo es que llegó a las MMA (Artes Marciales por sus siglas en inglés): “De niña entrenaba karate. Mi mamá me inscribió para inculcarme la disciplina, pero me enamoré. Aunque no teníamos mucho dinero, ella sabía que era algo muy importante en mi vida y se esforzó para que no lo dejara. Años más tarde comencé a buscar un lugar para entrenar boxeo; sin embargo, encontré el Muay Thai y se convirtió en mi segundo gran amor. El jiu jitsu llegó a mí porque un novio entrenaba. ¡Así llegaron las MMA!”.
No deja de sorprenderme. Para ella, la educación es vital en el desarrollo de una persona. Eso explica los dos títulos que obtuvo a sus 20 años: Justicia Criminal y Sociología. “Hubo un tiempo que quería ser policía, pero me desanimé porque no quería estar armada ni matar a nadie”.
Es momento de poner pausa en nuestra conversación, pues los invitados están listos para platicar con ella. Saca un espejo, arregla su cabello y pone un poco de labial en su boca. Cruzamos la mirada y señala: “Es que como mujer se puede tener las dos facetas: ser fuerte y a la vez usar vestido y maquillaje. Afuera de la jaula me gusta ser amable, pero cuando suena la campana quiero matar a mi rival".
El carisma y simpatía de Torres conquistan a los aficionados. Transmite la emoción de sus palabras y los hace reír con historias distintas. Esa noche fuimos a cenar. Tecia comió pollo asado y vegetales. El postre no lo perdonó. Compartimos un mousse de chocolate con frutos rojos y un brownie con helado de vainilla. Entonces confesó: “Creo que debería empezar a comer más sano, casi no hago dieta porque me encanta comer como adolescente: pizza, hamburguesas y papas fritas. ¡Mi delirio son los postres!”.
Con ascendencia boricua, portuguesa e irlandesa, tiene un objetivo en mente: “Quiero ser un modelo a seguir. Me considero una persona humilde, no fumo, no tomo alcohol y tengo muchos amigos”. En realidad, no deja de ser una chica de 25 años. Enamorada desde hace más de doce meses; disfruta del cine, sesiones de shopping en el centro comercial y estar en casa; tiene la ilusión de ser mamá antes de los 30 y le gustan artistas como Rihanna, Maroon 5, Katy Perry y Ed Sheeran.
Son las once de la noche. El día terminó para nosotras. Se despide y pregunta si nos veremos después. Ante mi respuesta afirmativa, sonríe y comenta: “¡Hay muchas cosas que platicar!”.
Así será.
Continuará…