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Entre Técnica Y Agresividad: Weidman vs Rockhold

Chris Weidman y Luke Rockhold nos traen una gala moderna del MMA en la pelea co-estelar de UFC 194 en el MGM Grand Garden Arena el sábado 12 de diciembre de 2015.

Antes de que las artes marciales mixtas se comenzaran a conceptualizar en su plenitud, mezclando las técnicas más efectivas según las habilidades y capacidades de cada peleador y el estilo y estrategia que quisiera implementar, los combates en UFC se marcaban por un enfrentamiento de estilos: boxeo vs jiu-jitsu brasileño; judo vs kickboxing; muay thai vs lucha; kung-fu vs taekwondo; grappler vs striker, etcétera. Habían casos excepcionales en las primeras épocas con peleadores como Ken Shamrock, quien tenía conocimiento general de lo que se establecería como MMA, trabajaba bien la lucha y las sumisiones, especialmente de pierna, pero también sabía golpear y desplazarse de pie.

Por supuesto que tanto Weidman como Rockhold tienen sus estilos particulares, sus estrategias, sus fortalezas y aunque no están en evidencia clara para el aficionado casual, también huecos en sus juegos de pelea. Sin embargo, también son dos peleadores que han sabido explotar las fortalezas que su talento natural les ha permitido, no casándose con un etilo en particular, sino un estilo que han encontrado más efectivo para cada uno. También es evidente que ambos siguen evolucionando, fiel al deporte del MMA, y cada vez que aparecen, entienden más de sí mismos, maduran como peleadores, y nos entregan actuaciones estupendas.

Weidman es un luchador por naturaleza y por convicción. Pero lejos de basar su estilo de pelea con elementos que rodeen su lucha, ha integrado su fortaleza en los derribos con un ground and pound fenomenal y sumisiones sólidas, y ha aprovechado sus grandes habilidades en los derribos y control de piso para poder ser agresivo en la pelea de pie, lanzando combinaciones, presionando a sus oponentes y sin temer los intentos de derribos de sus contrincantes.

Rockhold – y él mismo lo ha declarado – tiene un parado de surfista y skater. Conocido por sus habilidades fuera del tatami en otros deportes extremos, sí se refleja lo surfista en el manejo de su guardia, una bastante lateral, con su brazo adelantado caído y con desplazamientos lineales bastante veloces. Su equilibrio y balance le permite trabajar mucho su pateo y lo hace difícil de derribar, y cuando lo logran, transiciona rápidamente a llaves con un juego de sumisiones bastante fluido y agresivo,

Rockhold sabe explotar bastante bien su guardia zurda, encajando sus patadas redondas cuando obliga a sus contrincantes circular a su izquierda y por el otro lado mete bien su gancho de derecha. Pero algo curioso en el asunto es que Weidman está todo menos desacostumbrado con peleadores zurdos. Anderson Silva, Lyoto Machida y Vitor Belfort todos han representado el reto zurdo para Weidman, y Rockhold marcará la quinta pelea consecutiva en la que el campeón enfrenta a un zurdo.

Tanto Rockhold como Weidman pelean avanzando, sin embargo, Weidman es ligeramente más agresivo y es probable que ocasione que Rockhold retroceda en diferentes momentos de la pelea, lo que podría aprovechar para entrar al clinch, trabajar su golpeo desde la posición e incluso buscar el derribo. En el piso Weidman ha lucido fulminante con su golpeo a ras de lona, pero no ha enfrentado a un peleador con el entendimiento de las transiciones y con un juego de piso tan ofensivo como Rockhold.

De cualquier manera, ambos engloban un estilo moderno de pelea. No han buscado un estilo en particular, han encontrado las mejores herramientas que ofrecen distintas artes combativas a sus características físicas y mentales de pelea para desarrollarse como dos de los pesos medianos más completos y peligrosos del planeta. Weidman es el campeón, y por eso mismo el favorito, pero si ha habido un retador verdadero ha su trono ha sido Rockhold.

¿Se mantendrá invicto Weidman o se impondrá Rockhold como el nuevo campeón?