Luego de dos peleas ganadas, Cynthia Calvillo está lista para ser la pelea co-estelar en un evento del UFC, la cual por cierto será su cuarta pelea en el año y su sexta en menos de un año.
En UFC Glasgow enfrentará a la destacada striker Joanne Calderwood, quien se retiró del kickboxing con un récord de 19-2-0.
Es el máximo reto de su carrera, y para quien tardó quizá de más en llegar aquí, esta es la mejor forma, tráiganle a las mejores, donde sea, cuando sea.
Calvillo disfruta cada día de su vida como peleadora de MMA, porque simplemente eso es, una peleadora de Artes Marciales Mixtas desde la médula; y como dicen, cuando te gusta lo que haces…
Además, el dominio que Calvillo ha tenido le ha permitido esto, salir saludable de sus combates y poder aceptar siguientes compromisos prontamente.
Los más afortunados en esto son quienes podemos ver sus peleas y lo desenvuelta que se ve dentro del máximo escenario de MMA.
Calvillo mostró en dos combates dentro del Octágono no solo agresividad y técnica, sino tranquilidad.
Su “poca” experiencia profesional con solo cinco peleas quizá no lo muestren tanto, pero al verla pelear uno se da cuenta de lo contrario.
El octágono y ella son uno mismo, solo tardaron en juntarse, quedó claro desde su victoria por sumisión sobre Amanda Cooper y luego al repetir un mes después rindiendo a Pearl Gonzalez.
Se mueve naturalmente y cómoda en el más grande escenario, reflectores, cámaras y compromisos propios de una empresa grande como UFC no le estorban, molestan o preocupan; ella está concentrada en lo suyo y sabe que es parte del trabajo para al final subirse a la reja a divertirse.
Calderwood solo ha perdido dos veces en su carrera, ambas por sumisión, misma técnica con la cual Calvillo ha ganado sus dos peleas en UFC, ¿será que vemos una tercera?