La pelea coestelar del UFC 163 en Brasil el próximo Sábado 3 de Agosto es en peso semipesado entre el excampeón, Lyoto Machida (19-3), y Phil Davis (11-1-1), uno que busca subir en el ranking del peso que ha dominado desde el 2011 el campeón, Jon Jones.
Un excelente
entrante para el combate principal entre José Aldo y Chan Sung Jung, el famoso
“Zombi Coreano”.
El brasileño
Machida está buscando su tercera oportunidad titular, después que en el 2009
destronara de manera espectacular a Rashad Evans. Dos defensas más tarde, el
“Dragón” cayó noqueado por Mauricio “Shogun” Rua, para dejar a un lado aquella
mística que nos hacía pensar que este karateca era lo más cercano a un peleador
invencible.
En el 2011 volvió
a recibir su oportunidad, esta vez ante Jones, pero, como todos los que han
peleado con el actual titular en su reinado, Machida salió del octágono
derrotado. Ojo, cayó sometido, pero, al menos ganó el primer asalto, algo que
nadie ha podido conseguir con Jones.
Lyoto ha mostrado
que es parte de la élite de esta división de las 205 libras y, es por eso, que
un triunfo, sobre todo convincente, sobre Davis lo podría catapultar a otra
cita titular. En el ranking del UFC, él es el primer retador y, además, Davis
está en ese “Top ten”, así que la victoria puede saber a algo más que un simple
triunfo.
Es cierto que ha
perdido tres de sus últimas seis peleas, pero también es cierto que cuando gana
(la excepción ante Dan Henderson) lo hace de una manera convincente y
espectacular. Recordemos sus nocauts sobre Thiago Silva, Rashad, Randy Couture
y Ryan Bader, para revivir la calidad que puede mostrar este veterano peleador.
Con Machida, no
hay tintes medios. O gana o aburre. Y cuando ha estado enchufado, ha convencido
a muchos y ha estado entre los mejores en las Artes Marciales Mixtas (MMA por
sus siglas en inglés). Su técnica de golpeo, basada en el kárate, es muy
refinada. Su poder en los puños es inmenso y su pelea abajo es muy buena
también.
Como buen
brasileño, influido por el jiu-jitsu, no tiene miedo ir a la lona a trabajar
desde abajo. Claro, para él es mucho mejor pelear arriba y, sobre todo, dejar
al oponente que lleve la iniciativa para esperar que cometa un error y
terminarlo.
Este es un
peleador que estuvo invicto hasta que “Shogún” lo sorprendiera en Montreal para
arrebatarle su título. Hasta ese momento, la gran mayoría de los conocedores
del deporte y los fans celebraban su manera de pelear y el hecho de que era
casi imposible golpearlo.
Está claro que
esa dinámica ha cambiado con las tres derrotas que ha sufrido, pero no hay que
confundir eso con que ha bajado su nivel. Simplemente, los rivales han sido
grandes peleadores y en este deporte ya sabemos que no hay invictos. Si no,
pregúntenle a Anderson Silva.
Para vencer a
Davis, creo que es primordial que el combate se desarrolle arriba, para sacar
ventaja de sus herramientas y del pobre boxeo del rival. También, impedir que
Phil lleve la pelea a la lona y haga uso de esa lucha olímpica de primer nivel
que posee. Obligar al contrario a que trate de boxear y se vuelva indeciso. Si
a esto le agregas el factor del apoyo del público, Lyoto tiene muchas
posibilidades de salir triunfador.
Ojo, nada de esto
es garantía de que vaya a ocurrir así. Ya sabemos que en este deporte nadie es
invencible y que cualquier cosa puede suceder. Pero si el “Dragón” hace las
cosas a su manera, las posibilidades de ganar aumentan sobremanera, como ha
ocurrido en 19 ocasiones.
Así de sencillo.
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