Hace tan
sólo un año, Ryan Bader era
considerado uno de los jóvenes con mayor proyección
dentro de las 205lbs. Una
combinación letal entre el explosivo
luchador y el artista del nocaut. Lamentablemente,
se encontraría en el camino del actual campeón de la categoría, Jon Jones y no lograría levantar cabeza
frente al veterano Tito Ortiz. Bader
necesitará una victoria convincente este sábado por la noche en el UFC 139 para no perder relevancia en su
división.
Jason Brilz será el rival a vencer esa noche.
Un hombre sumamente aguerrido y rara
vez favorito en sus enfrentamientos. Su increíble batalla frente a Antonio
Rogerio Nogueira le ha merecido el 
reconocimiento por parte del público y, más aún, sabiendo que aceptó ese
combate a último momento cuando Forrest Griffin
sufrió una lesión. “El Hitman” dejó hasta el último aliento dentro del octágono
ese día y pese a que dos de los jueces fallaron en su contra (en decisión
dividida) el público lo vio como ganador aquel día. Bader reconoce y resalta
ese aspecto de su próximo oponente:
“Jason
Brilz nunca se rinde. Puede que no sea el boxeador más técnico, pero tiene
mucho poder en sus manos. No querrás recibir muchos de sus golpes”.
Jason Brilz
se ha quedado con las manos vacías en sus últimos dos enfrentamientos y espera
retomar la senda ganadora con una victoria frente a un ex contendiente en Ryan
Bader. Conciente de los peligros que afronta, Brilz define a su próximo rival:
“Bader es
un gran peleador. Sus habilidades en la disciplina de la lucha son sobresalientes y posee atleticismo y buen boxeo.
Creo que ha progresado mucho pese a sus dos últimas derrotas. He estado
esperando la chance de competir contra él” explica Brilz.
Ryan Bader
es el claro favorito en este choque
por ser el competidor más fuerte, mejor dotado técnicamente y con la capacidad
para terminar el pleito en un abrir y cerrar de ojos. Pero lo mismo se decía de
él en su enfrentamiento frente a Tito Ortiz y acabó besando la lona. El
veterano de la octava temporada del reality show The Ultimate Fighter deberá ser más agresivo y olvidarse de sus
anteriores derrotas. Su activo más valioso ha sido siempre la lucha y deberá
reencontrarse con esa disciplina para exprimir su máximo potencial.
Bader
deberá recobrar la confianza perdida
luego de dos pobres presentaciones. En este combate preliminar, que bien pudo
haber formado parte de la cartelera principal, el temple de cada uno de los protagonistas se pondrá a prueba sabiendo
que su continuidad pende de un hilo.