El 16 de noviembre, en Las Vegas, el canadiense Georges St-Pierre defenderá su corona wélter ante Johny Hendricks, en el evento que conmemora los 20 años del UFC, el UFC 167, en un combate que promete mucho y que enfrenta a dos tipos de peleadores muy diferentes.
El campeón, con marca de 24-2, se enfrenta a un retador que parece ser el más duro desde que recuperó su campeonato ante Matt Hughes en diciembre del 2007. Su reinado ha sido de seis años y nueve peleas, dejando en el camino a nombres como BJ Penn, Carlos Condit, Nick Díaz, Thiago Alves y Jake Shields, entre otros. Grandes guerreros todos.
Georges es lo más cercano a la perfección como peleador de Artes Marciales Mixtas (MMA en sus siglas en inglés). Él es un karateca que usa todas las disciplinas casi a la perfección, ya sea la lucha, el jiu-jitsu o el muay-thai. Ni que hablar del boxeo que muestra, sobre todo con su preciso y castigador jab.
Sin embargo, ante Hendricks (15-1) la cosa es bien dura y diferente. Johny es, probablemente, el mejor luchador a se vaya a enfrentar el campeón. No sólo eso, sino que el poder de su mano izquierda es impresionante y letal.
Entonces, ¿qué tiene que hacer Georges St-Pierre para salir triunfador la noche del 16 de noviembre en Las Vegas?
Creo que tiene que regresar a sus comienzos, al kárate. Ahí está su ventaja, en el uso del golpeo de manos y piernas, sobre todo teniendo en cuenta su gran rapidez. Hendricks tiene un puño izquierdo de otro planeta, su lucha olímpica es la mejor de las 170 libras, pero no es un especialista en kárate ni muay-thai. No acostumbra a usar sus piernas con frecuencia porque sabe que su mano es suficiente muchas veces. Su lucha, ni se diga.
Es ahí, arriba, donde creo que el campeón puede usar esas dos disciplinas para aflojar al contrario o, incluso, para acabarlo. Además, su jab de boxeo también puede ser determinante. Ojo, sólo el jab, porque entrar en intercambios brutales y descontrolados puede ser letal esta vez. No creo que haya nadie en esta división con la fuerza en una sola mano como Hendricks.
De todas formas, creo que a pesar de que Johny es un luchador de primer nivel, Georges ha logrado dominar esa disciplina y si la usa como complemento, para sorprender al contrario, no como elemento principal, podría serle favorable.
También, la experiencia juega un papel preponderante en muchas ocasiones, sobre todo en las grandes peleas y eventos. Y ahí, sin dudas, St-Pierre es el que lleva la mayor ventaja. Desde hace muchos años, él ha estado bajo los reflectores y está acostumbrado a este tipo de eventos.
La mesa está servida para que estos dos guerreros se enfrenten en un combate que puede significar dos cosas, la extensión del reinado de St-Pierre o el comienzo del de Hendricks.
Y en el papel luce muy parejo. ¿No les parece?
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